Fecha: 17.07.2023
Hora: 15:33 hs
(Hora local Argentina)
“Los hombres que han sido impulsados hacia la lucha, como resultado siguen una línea de acción. No está en sus manos decidir lo que sucederá. Para tales hombres, existirá siempre de una lado la victoria y del otro la derrota. Los sabios saben muy bien que ello se debe a kāla, el tiempo, y por lo tanto, no se regocijan ni se desmoralizan.” (Srimad Bhagavatam)
Todos compartimos las dificultades, y si estamos apegados a la experiencia, vamos a tener que devolver ese karma (acción), y esto implica un cierto tipo de espacio y tiempo en nuestra manifestación. Cada pensamiento, emoción y acción proviene únicamente de impresiones pasadas. Ketu es la ilusión del pasado. Da la noción de que hubo un pasado en nosotros. Rahu y Ketu van en contra de las normas sociales (es por eso que retroceden en el zodíaco). Ambos rompen reglas, y nos traen desafíos como si aún “cortándonos” la cabeza uno puede ser consciente. Los nodos de la luna, también llamados nodos del karma (Rahu y Ketu), siguen siendo protagonistas en cada lunación. El planeta dispositor de donde se encuentra Rahu, es decir Mangal (Marte), se encuentra junto al dispositor de donde se encuentra Ketu, es decir Śukra (Venus); y esto traerá transformaciones colectivas en una fase de aceleración, avecinando un cambio profundo de la psique colectiva. Esta es una configuración de inestabilidad que nos obligará al movimiento.
Durante esta luna nueva Surya (el Sol) se encontrará en Karkata (Cáncer). Este signo está caracterizado por su sensibilidad y capacidad de tomar contacto con las necesidades interiores. Este escenario abrirá la necesidad de dejar fluir más abiertamente nuestras emociones, y también albergará nuestro costado espiritual. Se manifestarán variaciones en nuestros humores, ya que según nuestro estado de ánimo miraremos la vida de ese color, lo cual nos vuelve fácilmente subjetivos. Karkata (Cáncer) está siempre alerta a los sentimientos manifiestos o no manifiestos de los demás, en cierto modo las necesidades de los otros activarán nuestra capacidad de nutrir y de proteger aquello que sea vulnerable.
La nākṣatra donde se producirá esta lunación será Punarvasu. Esta constelación, debido a la influencia de Guru (Júpiter) y Buddha (Mercurio), hará florecer un gran potencial en el campo de la comunicación. Su símbolo principal es un carcaj de flechas, que refleja la capacidad de emprender proyectos exitosos. La deidad regente de este asterismo es la diosa madre Aditi, que cuida el suelo en el que las semillas sanas pueden finalmente dar fruto. Su poder es la capacidad de obtener riqueza o sustancia. Aditi es la diosa de la tierra que otorga toda la abundancia y da a luz a todos los dioses.
El nombre de este nākṣatra consta de dos palabras: punar, que significa "repetición", "repetir" o "otra vez", y vasu, que significa "un rayo de luz", "una gema" o "una joya". Vasu también se traduce como próspero o bueno. Los Vasus son ocho deidades que proporcionan la base para la manifestación cósmica y terrenal. El lado oscuro de Punarvasu es una tendencia a sobre intelectualizar las experiencias de la vida, lo que puede producir una naturaleza crítica.
Debemos abrir nuestra mente a posibilidades ilimitadas. Este es un momento para dar conciencia a nuestras acciones.
El lado inarmónico de esta lunación estará entre Mangal (Marte) y Śani (Saturno). Mangal es lo nuevo y Śani representa lo viejo, de ahí que este contacto signifique un cambio a través de la ruptura de viejos esquemas o impedimentos. Puede significar también una acción explosiva, así que para disminuir el poder de agresividad, hay que atender más a las obligaciones procediendo de forma lenta y cautelosa. También significa presión emocional y estados de ánimos negativos, de manera que es aconsejable tratar de relajarse. Es un contacto que generalmente produce frustraciones en la actividad e irritabilidad emocional, ya que los esfuerzos suelen verse obstaculizados, por lo que hay que luchar contra impedimentos buscando una salida. Mangal significa fuerza y vigor, el deseo de una rápida acción y audaz, pero Śani frustra, retiene, enfría el entusiasmo de Mangal, es por eso que no sepamos si debemos usar la fuerza o mantenernos frenados, de ahí será nuestra confusión. El resultado puede ser un estallido contra todo lo que tiene límites. Pueden presentarse problemas con los vínculos o la necesidad de renovar los vínculos de algún modo.
Śani vakri (Saturno retrógrado) generará demoras en los plazos de las acciones realizadas. Durante este tiempo habrá una mayor lentitud en el progreso de sucesos que por lo general deberían ir a buen ritmo. Śani (Saturno) contiene, controla y regula. Además, se deberá revisar como uno comprende el comportamiento de los demás y el sentido de responsabilidad que eso trae a uno.
Desde el punto de vista afectivo, Śukra (Venus), el planeta del amor y de los vínculos, se encontrará en oposición a Śani (Saturno), el planeta de los límites, y esto puede generar sentimientos de soledad y tristeza, buscando aferrarnos a nuestros seres queridos. Es por el lado de los afectos donde sentiremos restricción o limitación, pero no quiere decir que no exista amor, más bien indica un tiempo de dificultades y necesidad de un mayor compromiso y sentido de responsabilidad en las relaciones.
Esta Luna nueva será una entrada a la transformación de nuestro mundo interior. Se manifestará un momento de prosperidad y fertilidad. La madre tierra “Aditi” se traduce literalmente como “sin límites”. Pero pueden haber dificultades en nuestra capacidad de concretar, de materializar, y de tener falta de realismo, si no hemos estado habitando un espacio para la contemplación y meditación sobre nuestras verdades facultades y necesidades.
Debemos de conectar con nuestra guía interior para aprender y madurar, porque en el silencio obtendremos las respuestas que tanto buscamos.
“Aditi es el cielo,
Aditi es el aire,
Aditi es todos los dioses,
Aditi es la madre, el padre y el hijo,
Aditi es todo lo que nacerá.”
(Rig Veda)
Om Namaḥ Ṣivāya
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