PREGUNTAS FRECUENTES
¿CÓMO SERÁ MI SESIÓN?
La sesión se realiza al momento solo por videollamada, vía zoom. La duración es de una hora y media, aproximadamente, dependiendo del servicio solicitado. Allí se dará toda la información correspondiente y se podrá realizar todas las preguntas que uno desee.
La sesión será grabada para luego poder ser escuchada otra vez. Además se entrega un archivo en PDF con toda la explicación de la misma en forma escrita, más el gráfico de la carta astral.
¿QUÉ ES UNA CARTA NATAL?
“Un niño nace en tal día y en tal hora, porque los rayos celestes están en armonía
matemática con su karma individual.” (Paramahansa Yogananda)
La carta natal es un mapa de nuestra vida, una fotografía exacta del cielo en el momento de que nacemos.
Allí podemos ver la configuración astral con la que llegamos al mundo, que marcará nuestra personalidad, potencialidades, talentos, debilidades, entre otras, que nos acompañarán a lo largo de nuestra vida.
Con la lectura de la carta natal se descubren características del individuo, que de otra forma pueden permanecer ocultas, dándonos la oportunidad de potenciar cualidades propias que desconocemos o de comprender ciertas conductas y situaciones que se repiten o no somos capaz de controlar.
La interpretación de la carta astral nos ayuda, a nivel personal, como herramienta de autoconocimiento y evolución.
¿QUÉ ES UNA REVOLUCIÓN SOLAR?
“La base del propio desarrollo está en el poder de reorientarse uno mismo en el espacio, lo que significa literalmente -encontrar un nuevo oriente-. La reorientación, en su sentido más profundo, significa percibir al Ser (Ascendente-Descendente) desde un nuevo punto de vista en el espacio.” (Dane Rudhyar)
La revolución solar indica el momento del año en que el Sol regresa a la misma posición que en el nacimiento.
El Sol vuelve al mismo grado, minuto y segundo que en el día en que nacimos. Cada año solar se abre un nuevo ciclo donde tenemos la oportunidad de abordar determinados procesos que se dispararán en nuestra experiencia anual. Es una oportunidad de crecer, de desarrollar consciencia con herramientas. En cada revolución, los planetas se ubicaran en diferentes áreas, campos arquetípicos en los que transita todo ser humano, para iluminar y concientizar un proceso determinado que forma parte de la totalidad de nuestro desarrollo evolutivo.
A través de la revolución solar podemos ver el potencial que está disponible para nuestro año (de cumpleaños a cumpleaños), analizando siempre el punto de la revolución anterior para entender de dónde venimos y a dónde vamos.
La carta de revolución solar será una carta de energía disponible, una carta de pistas para aprovechar, que brinda una información valiosa para nuestro aprendizaje y es un eslabón de una cadena mayor.
¿CÓMO ES EL TAROT?
“A las cosas de la tierra hay que conocerlas para amarlas; a las cosas divinas se las
debe amar para conocerlas.” (Pascal)
Las cartas del tarot son un mapa de un viaje interior en el cual todos nos hallamos embarcados. El tarot se revela como un ordenamiento simbólico. La adivinación consiste en la revelación del proceso alquímico “conócete a ti mismo”. Conocer el propio destino implica reconocer la propia índole. Los acontecimientos son las situaciones a través de las cuales discurre nuestro viaje. Las imágenes del tarot no significan personas, cosas o acontecimientos, sino que proyectan a las personas, cosas y acontecimientos dentro del contexto de la ineludible odisea anímica. Cuando se consulta el tarot, no son las cartas las
que hay que leer, lo que debemos leer es la propia vida. Los símbolos no se resuelven en situaciones, sino que sugieren el significado de las mismas. Es un medio de autoconocimiento, del descubrimiento del “ethos” (genio configurador del destino); el tarot es un medio de adivinación: reconocimiento del destino individual que orienta el viaje del que somos, a menudo sin sospecharlo, punto de partida, transcurso y meta. El tarot nos ayuda a conocernos a nosotros mismos.
¿EXISTE LIBRE ALBEDRÍO?
Un adagio frecuentemente citado:
“Astro inclinant, non necessitant”
(los astros inclinan pero no obligan).